Definitivamente todos somos
diferentes y eso se refleja en nuestros gustos principalmente; en esta ocasión
hablaremos de los gustos secretos esos que solo salen a relucir en la cama o en
el lugar donde nos agarre la calentura.
Algunas
cosas pueden ponernos más que cachondos y obtener un placer inimaginable por
esa acción u objeto, bien dicen que “siempre hay un roto para un descosido” y
en el caso de las filias sexuales no es la excepción debido a que muchas se
complementan como lo veremos a continuación.
En las parejas sadomasoquistas también se pueden presentar otras filias como la merintofilia y catafilia. |
Entre
las prácticas sexuales, consideradas como filial, más comunes, encontramos el
exhibicionismo y el vouyerismo; la primera es el gusto por mostrar y ser visto,
mientras que su complemento, el vouyerista, es aquel al que le agrada mirar.
Por otro lado hay otra pareja más dolorosa de filias, el sadismo, el placer por
infligir dolor físico y someter a otros; esos otros a quienes les gusta sufrir
de estas vejaciones son los masoquistas quienes consiguen la satisfacción al
recibir con agrado las prácticas de un sádico.
Pero
en la cuestión sexual no solo están las filias sino las parafilias, que se
tratan de un comportamiento sexual en donde el mayor placer no se encuentra en
el acto en sí sino en otra serie de prácticas asociadas a él. Dentro de estas
prácticas encontramos algunas bastante extravagantes; sin embargo en algunos
casos muy comunes. ¿Se identifican con alguna?
Agorafilia:
Atracción por la actividad sexual o el exhibicionismo en espacios abiertos o
lugares públicos.
Agrexofilia:
Excitación producida por el hecho de que la actividad sexual sea escuchada o
vista por otras personas.
Coreofilia, unas clases de Pole Dance no serían mala idea si tu pareja gusta de ver esta práctica. |
Amaurofilia:
Pasión por las parejas ciegas o con los ojos vendados.
Anastimafilia: Personas
a las que les excita el sobrepeso de los demás.
Asfixiofilia:
(estrangulación erótica): El estímulo es estrangular, asfixiar o ahogar a la
pareja durante el acto sexual, con su consentimiento y ¡cuidado! es sin llegar
a matarla.
Agonofilia:
¿Te prende más la reconciliación? Atracción por la lucha con la pareja.
Excitación que surge en la pareja después de una pelea física.
Catafilia:
Excitación sexual del hombre cuando se somete a su pareja.
Coreofilia:
Atracción por la danza y baile erótico. Seguro eres fan de los “table”
Cronofilia: Se
trata de una parafilia en la que la edad del sujeto se considera inadecuada con
la edad de la persona objeto de la atracción sexual. El término fue inventado
por el psiquiatra John Money. Existen varios tipos: Gerontofilia, Paidofilia,
Efebofilia, Infantofilia o nepiofilia y Teleiofilia.
Crurofilia:
Atracción por contemplar o acariciar las piernas.
Crurofilia, no por nada las medias y el liguero son tan pedidos. |
Erotofonofilia:
Atracción por realizar llamadas telefónicas (normalmente anónimas) utilizando
lenguaje erótico u obsceno.
Estigmatofilia:
Atracción producida por el hecho de que la pareja tenga tatuajes,
agujereamientos (píercing), sacrificios o cicatrices
Fonofilia: Se
trata de la necesidad de escuchar dichas palabras obscenas durante el acto
sexual.
Galactofilia:
Atracción por beber leche del pecho de una mujer
Gimnofilia
o nudomanía: Excitación producida por la desnudez.
Ginemimetofilia:
Atracción sexual por los travestis o por hombres que se visten o comportan como
mujeres
Merintofilia:
Excitación sexual producida al estar atado. ¿Qué tal un poco de bondage?
Otofilia:
Atracción por las orejas. Las mordidas y caricias en el lóbulo de la oreja son
un infalible para excitar a casi todos.
Pigofilia
o pigotripsis: Placer producido por el contacto o roce con
las nalgas. En el Metro puede llegar a ver muchos de estos.
Pornofilia:
Atracción por todo lo relacionado con la prostitución y simpatía hacia sus
profesionales (nada que ver con los videos porno)
Somnofilia:
Atracción por acariciar y realizar sexo oral con una persona dormida hasta
despertarla. Con alguien así todos serían buenos días.
Urofilia,
urolagnia u ondinismo: Atracción por ver orinar o ingerir orina.
La famosa lluvia dorada.
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